jueves, 30 de julio de 2015

La entrevista en nuestro mundo líquido

Zygmunt Bauman en su libro: “Trabajo, consumismo y nuevos pobres” sostiene que el
reconocimiento social y económico se logra adaptándose a las nuevas formas de
contratación, mediante la entrevista, los potenciales trabajadores deben transformarse
en productos capaces de atraer la atención para generar la mayor demanda posible.
Aquellos que buscan empleo han de saber venderse durante la entrevista, han de tener
buena presencia, estar preparados para las tareas a realizar, ser disciplinados y estar
dispuestos al trabajo duro y sin apenas reivindicaciones. Además la responsabilidad de
encontrar o no trabajo recae en el propio “vendedor de sí mismo.

Estas personas, en nuestro mundo líquido probablemente tengan que invertir y seguir
invirtiendo para mantenerse “vendibles”, estando obligados continuamente a
incrementar su valor en el mercado, es decir, por ser el mejor producto.

En un mundo líquido, como afirma Bauman las organizaciones buscan personas sin
compromisos y que sin importar los incentivos económicos puedan cambiar de empleo
con total facilidad y sin estar sujetos a ninguna atadura. Este sacrificio, tan demandado
en las entrevistas de trabajo es consecuencia de una sociedad líquida donde impera
una crisis económica; una progresiva disminución de la clase media y un aumento de la
infraclase producto de las nuevas tecnologías y una era donde impera el omnipresente
afán por consumir.


Firma: Miriam Weimert


Fuentes: Bauman Zygmunt. Trabajo, consumismo y nuevos pobres. Barcelona. Gedisa
(2000)